Santiago Chapar se integra a la Clase Uno contando con grandes antecedentes deportivos, entre ellos un título en 2018.
Continúan arribando nuevos nombres a las filas de la categoría y entre ellos surge el de Santiago Chapar, quien ha sabido ser protagonista a nivel zonal y ya tiene todo dispuesto para comenzar a construir su camino dentro del nivel nacional, optando para ello por la Clase Uno y sobre una unidad propia, la cual conoce a la perfección tras haberse destacado con el mismo auto dentro de la Monomarca Fiat, dónde ha sabido alcanzar un campeonato y peleó hasta el final el de la temporada pasada, culminando con victoria en la última fecha.
Pensando en este nuevo proyecto que lo muestra como protagonista, el piloto proveniente de Necochea mantendrá el auto que venía utilizando hasta el momento y que tantas alegrías le ha generado, destacando que atraviesa una serie de reformas con la idea de probarlo los primeros días de febrero. En cuanto a la atención, será propia mientras Gustavo Vazquez se ocupará de los motores.
“Será un gusto estar presente dentro de una categoría como el Turismo Pista que cada día crece más. Tenemos la posibilidad de conocer el auto y el tipo de manejo que conlleva, es por ello que la adaptación se centra en conocer nuevos circuitos como así también afianzarnos a la exigencia de la categoría. Esperemos cumplir con esto e ir creciendo fecha tras fecha”, manifestó Santiago Chapar, quien tendrá el número 69 en los laterales de su auto.
El arrecifeño opinó en desacuerdo con la penalización impuesta en Barber exponiendo razones y opiniones de otros pilotos, y aseguró que de no ser por ello podría haber terminado en el Top 10 de la tercera fecha de IndyCar. Ricardo Juncos, dueño del equipo, también analizó la carrera donde Romain Grojsean fue 12º y Agustín Canapino 20º.
Oscar Larrauri volverá a conducir un Fórmula 1, en Imola
En el marco del Gran Premio de la Emilia Romaña de Fórmula 1, Oscar ‘Poppy’ Larrauri tendrá la oportunidad de volver a manejar el EuroBrun ER188 con el cual disputó 7 grandes premios en la temporada 1988.
Un señor adinerado tuvo el placer de adquirir el EuroBrun con el cual Larrauri manejó, e invitó al argentino a manejarlo el fin de semana del GP en Imola, donde podrá salir en diversas tandas de 15 minutos a lo largo del fin de semana, como parte del espectáculo previo a la gran carrera. En dicho evento, estará junto a su familia y viejos amigos del automovilismo que lo acompañarán en un evento inolvidable.
Nacido en Rosario, Santa Fe, el 19 de agosto de 1954, Oscar Rubén Larrauri representó a su localidad de residencia, Granadero Baigorria, por toda la provincia con la Limitada Santafesina, y producto de sus éxitos, logró la oportunidad de llegar a competir en Europa, ser campeón de Fórmula 3 Europea en 1982 y tras un destacado paso por Sport Prototipos (2º puesto en las 24 Horas de Le Mans 1986) y un título en la Renault Alpine V6 (1985), llegó a la Fórmula 1 con el equipo de Walter Brun. En dos temporadas pudo correr pocas carreras con autos poco competitivos y en la época de las preclasificaciones, donde no todos los autos tomaban parte del GP.
Luego de 16 años corriendo en el hemisferio norte, entre Europa, Norteamérica y Asia, consiguiendo en 1993 el campeonato de Gran Turismo Italiano con una Ferrari 348, Larrauri llevó sus victorias nuevamente a Sudamérica, siendo tricampeón de la Copa de las Naciones con BMW y Alfa Romeo, y tuvo su paso por TC2000, Top Race, Turismo Carretera.
Dover fue el escenario de la tercera victoria sobre once carreras para Denny Hamlin (Toyota) en lo que va de la temporada 2024 de NASCAR Cup Series.
En una carrera que esperaba más emociones fuertes, Denny Hamlin la controló muy bien en un final donde Kyle Larson (Chevrolet) era un perseguidor fuerte, pero sin el ritmo suficiente para atacarlo y derrotarlo. El Toyota número 11 del Joe Gibbs Racing lo hizo de nuevo, a pesar de no ser el auto más regular.
Martin Truex (Toyota), fue tercero dejando en claro el poderío de los Toyota en Dover. Los tres punteros del día están luchando codo a codo por llevarse la fase regular, a la cual aún le queda más de la mitad de recorrido.