El rosarino Felipe Granata no pudo cortar la mala racha en Paraná, por la sexta fecha de la Fórmula 3 Santafesina. Un fuerte accidente tras largar segundo en la final del sábado lo dejó hospitalizado por algunos dolores sufridos, y sin poder competir el domingo porque le destrozaron el auto.
Clasificando noveno, Granata esperaba aprovechar la competencia sabatina para pelear por un triunfo o como mínimo otro podio en la F3. Pero rápidamente, en los primeros metros se dio un toque con varios rivales, donde uno lo embocó de lleno y le destruyó el auto. Felipe salió con algunos golpes y quedó hospitalizado, sin consecuencias de gravedad.
Sin poder correr el domingo por los daños, ahora será momento de una profunda reparación y esperar a ver cuándo se podrá volver a las pistas junto a su padre Gabriel, haciendo un enorme esfuerzo cada fecha y ahora teniendo que dar un extra para recuperar el monoplaza.
“Venía segundo doblando a la par de Saboretti en la primera curva y me tocaron de atrás. Quedé en el medio de la salida de la curva y me chocaron como tres autos. Fui al hospital y me hicieron radiografías y no tengo nada grave, aunque podría tener algo ligamentario. Nos tuvimos que volver y si bien el auto es recuperable, nos va a tomar un tiempo. Más aún con la crisis que hay ahora. Agradezco a todo el equipo médico que me atendió de muy buena manera en todo momento. Ahora será tiempo de analizar el auto y dudo que estemos en la próxima fecha”, aseguro Felipe.
Mauro Calandria – Prensa Felipe Graata / Foto: Hernán Rodríguez
