Tras su fuerte accidente en Rafaela, el santafesino dejará todo junto a su equipo para recuperar el auto para la tercera fecha del Fiat 600-TS.
“Fue un fuerte golpe que me dejó con las manos vacías. De salud estoy re bien pero fue fuerte el golpe para el auto. Doy el abandono, me duele dejar el 600”, declaró primariamente el joven santafesino, entristecido por lo ocurrido. Horas más tarde, cambió el panorama y aseguró: “Gracias a todos y lo que pensé ahora es no abandono a mi locura y mi pasión que es el Fiat 600. Arranqué ahí y voy a morir ahí. El Fiat 600 número 14 estará presente en Paraná”.
El análisis veloz del auto dañado indicaba que era imposible de recuperar, pero lo mismo sucedió en Alta Gracia en 2014 con su máquina, la cual se reconstruyó y anda en nivel de punta. Si aquella vez resultó, ¿por qué no ahora? Eso mismo se planteó y ya están manos a la obra. Lederhos reveló: “Hasta ahora el equipo está trabajando a full para Paraná, cortando las partes rotas. También se está revisando motor y caja. A pesar de todo, tenemos el auto para correr la punta”.
Más allá de las adversidades, este equipo está haciendo lo imposible, hasta con ayuda ofrecida de rivales en pista, para que la categoría más antigua de Santa Fe en vigencia tenga un buen parque automotor en la carrera 500.
Mauro Calandria / Foto: Alejandro Gómez
